Para mi ha sido una sorpresa, ya que no tenía pensado cambiar de centro y menos a estas alturas, además ya me habían mandado indirectas de otro centro en el que había trabajado de cara al verano, y a mayores tengo un proyecto que llevar a cabo en verano que está subvencionada por una entidad bancaria.
Vamos, que no doy a basto y aunque lo parezca, no me estoy quejando.
El trabajo que desempeño ahora es similar al que venía haciendo, la edade la misma (los mayores de 2-3 años) pero las funciones son parecidas. Tengo un grupo de 20 niños y niñas que son unos brutos, pero bueno, aún tengo que hacerlos a mi y yo a ellos, por lo pronto ya me se 32 nombres que no es poco.
Seguro que os preguntaréis que por qué un cambio a estas alturas, y bueno, si no os lo preguntáis ya lo cuento yo: trabajar en la escuela infantil publica es un 'chollo'. No solo por las condiciones de trabajo, sino por que a largo plazo podrías obtener tu propia plaza en una de ellas, o en caso de opositar tienes puntos de experiencia, y aquí no se puede descartar nada.
Lo malo es que ahora mismo me ha tocado encargarme de los ultimos detalles del Día de la Madre y es un follón porque lo que queda no es muy complicado pero da trabajo, sobre todo si tienes a todas las criaturas desmadradas tirando por el aire las piezas de construcción o dándose con los tenis en la espalda a la par que lloran a gritos porque les están pegando....
Si sobrevivo volveré a publicar este fin de semana. Un abrazo!
Ay, pobre!! paciencia, no queda otra...Sé lo que son 20 niños sin domar... Poquito a poco los harás a tí. Y seguro que ese proyecto para el día de la madre también sale adelante.
ResponderEliminarAnimo.
Besos.